Entradas

Tener dinero en Andalucía va a resultar sospechoso

Imagen
BOLETA DE IDA Y VUELTA Pues va y resulta que esta temporada tener dinero en Andalucía va a resultar sospechoso. ¿De qué? de tener parné. No los ricos, a ellos se les tiene envidia pura y dura o cochina. El profesional que tenga un capital por méritos propios también es sospechoso y en realidad al que quieren sisar la ganancia bruta con un aumento de la recaudación. No es que no paguen ya, es que van a pagar más por vivir en la bendita tierra andaluza. Frente a la galería popular esto queda muy bien, como la expropiación de pisos a los bancos o el anunciado banco de tierras, con el que sueña la progresista Izquierda Unida, tratando de reverdecer aquella exigencia de tierra y libertad, en la época de la Política Agraria Común europea y en una España que es potencia agrícola. Cómo se puede llegar a ser carpetovetónico sin pretenderlo.

Fuegos fatuos

Imagen
Un ninot. Viendo las últimas imágenes del señor Silvio Berlusconi , tal se asemeja a un personaje que trate de escaparse de una hoguera romana, de una falla valenciana plantada a destiempo. Ese rostro moldeado, tez morena, que trata de huir del tiempo, con esa sonrisa de intriga palaciega. Traicionera, en el sentir de ese pueblo menos ilustrado al que él precisamente apela para salvar a Italia. ¿Estaría tan botoxmoldeado y terso el rostro de Nerón, con fama también de incendiario? Pero puestos a quemar, Silvio parece adelantarse a arrimar el ascua al gran incendio que puede llevarse por delante la tranquilidad de un país, además de la buena racha de la prima española. Todo un personaje este ninot que pasará a la historia: ya se verá con qué enfoque. Como este otro, también de carne y hueso, que es Francisco Rico , filólogo y experto en El Quijote . Sí, un personaje de ficción en la trilogía de Javier Marías, que representa desde su exquisitez clásica la cara opuesta al popul

Todo español que viene a este mundo

Imagen
BOLETA DE IDA Y VUELTA Todo español que viene a este mundo, camino de imperfección, nace con una tara de fábrica o un don especial, según la perspectiva del que padece o el que ejecuta. Todo lo que diga desde el momento en que sea capaz de articular pensamientos será tenido en su contra. Quizá por eso aquí esa advertencia en defensa de los derechos del acusado no cause impresión: ¡ y a mí qué so mamarracho! No es cosa de ahora, que disponemos de las televisiones, las radios, los periódicos y el Twitter. Seas presidente del Gobierno o un simple compañero de tajo u oficina protagonizarás la maledicencia por activa o por pasiva. De ahí que al español de pro le gusten tanto las tertulias y disfrute gozosamente del la hora del cafelito. Sea pues que en las pandillas de la tierna juventud comience a forjarse ese espíritu nacional, que moldea el don natural y lustra la tara de fábrica.