Marchando una de bocazas

BOLETA DE IDA Y VUELTA


La insoportable levedad de tantos bocazas que andan sueltos a lo largo y ancho del territorio patrio y que, además, son responsables en lides políticas.

Estuvo feo la algarabía de la muchachada del Partido Popular en Málaga acosando a la presidenta de los andaluces, Susana Díaz, quien hoy gestiona una Administración que anda a la cuarta pregunta según qué partidas presupuestarias. Otra Administración, la municipal, también anda tiesa tras el reciente tiempo del cuento de la lechera. A lo mejor unos y otros tienen la obligación de sentarse y echar las cuentas, no las de la vieja, las que pueden permitirse con los impuestos que se pagan, los que pagan.

Que el dinero público no es maná del cielo y tiene un propietario que es el pueblo español.

Mentecato el socialista cordobés Juan Pablo Durán, quien según se le contempla en este vídeo vive las fantasías de las hazañas bélicas de la guerra civil de nuestros antepasados.

Otro sí. ¿Realmente cree en esto que dice?: "Estamos en un estado de excepción encubierto con un uso indebido de las fuerzas y cuerpos de seguridad y de la maquinaria judicial para hacer daño y escarniar a las personas".

Hacer escarnio, tendría que haber dicho, que es lo que hace el acusador del vídeo  con quienes contemplan la política como noble arte para mejorar la convivencia social.

Y aunque algunos lo olviden, la convivencia pública se regula con las leyes. Quien se las salta es de obligación que afronte las consecuencias de su acto.


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