Para nada un país de emigrantes

BOLETA DE IDA Y VUELTA




Todo buen español tiende a ser truculento. Al menos en su sentido de morboso, antes que de criminal. ¿Por qué nuestros medios de comunicación que presumen de etiqueta seria no van a ser menos?

Somos exageraos. Ahora nos dicen que España se ha convertido en un país de emigrantes, con reportajes sentimentaloides en los medios impresos, aéreos, por TDT y hasta satélite. Y viene CarmenGonzález Enríquez, investigadora principal de Demografía, Población y Migraciones Internacionales del Real Instituto Elcano y nos suelta que no, que no hay tanto emigrante como pudiera parecer y nos imaginamos.

Pero lo que es digno de reflexión es esta conclusión sobre la que incide la investigadora, la desmesurada atención al fenómeno explicable desde una óptica localista, que habría quizá que cambiar: no es un drama la salida laboral al extranjero. Es más, por qué no son más, muchos más, los que deciden buscar mejores condiciones salariales y vitales en otros países.

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